jueves, 16 de junio de 2022

CÓMO ME HICE PIRATA

Una mujer se lleva la mano a la boca

Acaba de descubrir que está embarazada

Piensa en la última vez que tuvo sexo

Hace memoria del primero hasta el último de los detalles

A las cinco y media de la madrugada

Está esperando a su amante cerca del astillero

A pesar de que él entra a las seis

Cuando lo ve llegar le dice tenemos que hablar

Pero no sabe que su amante es un telépata

Capaz de leer los pensamientos de ella

Y de varias otras mujeres del pueblo

Él insiste en que se reúnan a las seis de la tarde

En el borde del bosque

Cuando termine su jornada laboral

Pero una vez juntos antes de que él siquiera escuche

La introducción ensayada que la tuvo despierta

Toda la noche

Apenas la tiene en frente intenta morderla

Primero la bufanda que termina escupiendo

Y después el manubrio de la bicicleta

Que ella deja caer para perderse entre los árboles

Corre y corre sin mirar atrás un largo rato

El suficiente como para no encontrar el camino de regreso

Se hace de noche se duerme contra un árbol

En un momento el ulular de una lechuza la despierta

Y la sed le devora la garganta

Sigue con sus últimas fuerzas

Hasta encontrar una corriente de agua

En la que hunde su cabeza haciendo equilibrio sobre unas rocas

Un poco más allá ve un ojo de fuego

Suspendido en la oscuridad

Se arrastra hasta entrever el contorno circular de una cabaña

Al gritar ayuda tres hermanas abren la puerta

Tres viejitas que la invitan a pasar

Y le ofrecen un techo comida consejos

Sin pedir nada a cambio

Vive un tiempo con ellas

Como si fuera la hermana número cuatro

O una prima que acaba de volver de un viaje

Que no salió como esperaba

Y necesita urgente reordenar sus ideas

Hasta que un día le comunican que llegó la hora de elegir

Entre volver al pueblo

O aprender el oficio de la brujería

Ya que han visto que tiene aptitudes

Una cierta perspectiva afín que sale a relucir

En los quehaceres de la vida diaria

Algo así como una predisposición áurica

Pero la mujer duda

No responde afirmativamente de rodillas

Lo que al parecer ninguna de las tres hermanas esperaba

Entonces la mayor le agarra la muñeca

Y comienza a leerle la palma de la mano

Donde hay escrita una historia larguísima

Que la bruja murmura para sí misma

Mientras sus ojos se van poniendo en blanco

La mujer infiere por el tono de voz

Que las cosas por un tiempo le van a ir mal

Después muy bien demasiado bien se podría decir

Una seguidilla increíble de varios triunfos personales

Hasta que la bruja de repente calla le suelta la mano

Pide por protección en una lengua desconocida

Su cara de momia deformada por el horror

Las otras dos echan a la mujer de la cabaña

Cuidando de no tocarla directamente

Sin importarle que casi no puede caminar

Por el tamaño de su vientre

No le queda más opción que volver a vagar por el bosque

¿Intentar otra vez encontrar el camino de regreso al pueblo?

Esa misma noche la menor de las brujas la alcanza

La cubre con una manta le deja una canasta con comida

Y hace aparecer en la mano de la mujer

Un frasco con un brebaje que no necesita de explicaciones

Finalmente antes de despedirse

Un último regalo

Le explica cómo llegar al puerto

A qué bar debe ir y cómo debe vestirse

Para que la confundan con un hombre

Y poder pedir trabajo como marinero

En alguno de los tantos barcos que cada mañana

Se alejan para siempre de esta playa maldita

domingo, 5 de junio de 2022

REFUSILOS


Toda la noche

Todos estos años

Intentando descifrar mi mente

Con mi mente

 

*

 

Ese instante único

En el que estás tan lejos

Que es imposible saber

Si se acerca o se aleja

 

*

 

Si pudiéramos conocernos a fondo

No habría personalidades

Como en un pozo

Nos vaciaríamos en el otro

 

*

 

Si mi mente piensa en el vacío

¿Es mi mente la que se vacía

O es el vacío el que se llena de mí?

 

*

 

No estar a la cacería del presente

Sino que el presente no pueda alcanzarnos

 

*

 

Continuamente extasiado

Por el mero hecho de estar respirando

 

*

 

La historia de lo que soñé dormido

Aunque cueste reconstruirla

La verdadera historia

 

*

 

Que tu cuerpo siempre se te adelante:

El castigo por estar vivo

 

*

 

También la muerte

¿Todavía no haber nacido?

 

*

 

Cargar con la convicción

De que cualquier evento que te atraviese

Alguien ya lo experimentó antes

Y sin embargo

 

*

 

Desintegrarse hasta desaparecer

En justificaciones que no explicarán nunca

Los intentos por justificar

 

 

*

 

Y entonces repetí tu nombre hasta volverlo un mantra

En el que al fin pude perderlo

 

*

 

Hablando de agujeros negros

Acá donde empezó todo

En el ombligo del mundo

Acá también termina

 

*

 

Escucho que dicen mi nombre

Como si alguien intentara

Y no pudiera despertarme

 

*

 

Quietud. A la espera de eso

Que es imposible a la luz del día

 

*

 

Pensé que estaba retrocediendo

Pero nadie puede evitar ir más que hacia adelante

Aunque pise mil veces sus propias huellas

 

*

 

Hasta siempre agradecido

Por haberme regalado la llave

De una puerta que todavía no existía

Una puerta necesaria

 

*

 

No está en la naturaleza de los recuerdos

Olvidar

 

*

 

Hundiéndose

Hasta más allá del fondo

Otra cima aparece

 

*

 

Una soledad total

En la que incluso yo esté de más

 

*

 

 

 

 

LAS VÍAS


Sueño con mi abuela que camina por unas vías de tren

Unas vías oxidadas que no tienen principio ni fin

Unas vías que dividen en dos una llanura desértica y rocosa

En la que no se ve a nadie por más que yo sepa

Como se sabe en los sueños que por debajo del suelo

Hay criaturas que en cualquier momento podrían salir

Para cazar, para aullarle a la luna y aparearse

Entre las piedras aunque por el momento

Puede que estemos a salvo porque el tiempo

Tal y como lo vivimos del otro lado

Parece haberse ralentizado

Parece no tener ningún tipo de poder en esta zona

Así lo siento en el aire que entra y sale de mí

En cámara lenta

En mis manos que se mueven

Como si explorara el fondo del océano

Soy así dirigido sin ningún tipo de voluntad

Hacia ella que camina de espaldas

O más bien flota dentro de un vestido blanco

Que parece una sábana o una mortaja

Y no es la misma persona que encontré hace años

Tirada en un baño en la mitad de la noche

Sino una mujer de 30 o 40

Una imagen que solo podría haber visto en fotos

La imagen de una inmigrante latinoamericana

Perdida en un planeta desconocido

Cuidando de que no se apague una vela

Que protege del viento con las manos

Contra su pecho

Para que yo no me pierda

(Porque los dos sabemos

O más bien ella me está mostrando

Que las noches son largas en el desierto

Tan largas que terminan por comerse el día

Y no hay más vías que estas por las que vamos) 

miércoles, 25 de mayo de 2022

ARS MINIMA


I

 

¿El fracaso?

El poeta menor no le tiene miedo al fracaso

No comulga con la idea de fracaso

El fracaso sería el momento en que el ouróboros

Saborea su propia sangre

Que dicho sea de paso es lo único que puede apagar su sed

 

 

II

 

El poeta menor lee literatura

De la misma manera que come una manzana

O se saca los pantalones

Como si fuera no la última

Sino la primera vez

Aunque si pudiera elegir

Elegiría reencarnar en un meteorito, una cueva

O un chita

Cualquier cosa mientras sea capaz de mantenerse

Lo más lejos posible del lenguaje

 

 

III

 

El poeta menor imagina que la historia de la literatura

Es una vagina dentata de dimensiones inconcebibles

Hacia la cual nos dirigimos con los ojos vendados

Tanteando los jeroglíficos en los muros de carne

Apoyados los unos a los otros

Guiados únicamente por los versos que pudimos memorizar

Y por la estela de un olor fuertísimo

 

 

IV

 

Cada vez que escucha la palabra póstumo

El poeta menor visualiza a un senador romano

El más noble de todos los que debaten en el Foro

El más fiel al Emperador

Y por eso mismo víctima de una intriga de envidiosos y corruptos

Por la cual se le terminan confiscando todos sus bienes

Persiguiendo a sus hijos, hermanos, sobrinos, etc.

Quemando públicamente los discursos que en el pasado

La plebe escuchó con un silencio de ultratumba y después aplaudió de pie

Mientras silbaba y clamaba Póstumo! Póstumo!

Pero cuando finalmente su nombre

Ya es casi sombra

Y sus calumniadores le dan a elegir

Entre el destierro y el suicidio

Cuando una esclava agitada le comunica los rumores

En el momento de la verdad

¿Qué creen que decide Póstumo?

¿Qué creen que diría

El poeta menor?

¿Qué hubieran elegido ustedes?  

 

 

V

 

El poeta menor adquirió la certeza de que es menor

Después de un sueño en el que entra a un museo

Invitado por alguien que acaba de conocer

De una modelo o un modelo

No puede saberlo porque lleva una máscara de cuero

Que le cubre toda la cabeza

¿Y qué están yendo a ver?

Todavía no lo sabe pero intentan colarse en una fila larguísima

Aprovechando que, después de esperar

Durante lo que parecen años

Se han formado entre la multitud diferentes clanes

Que están peleándose entre sí para llegar primero

¿Y a dónde?

De a poco alcanza a ver a lo lejos

Un alto pedestal iluminado por antorchas

Rodeado de cuatro estatuas sin cabeza

Que realmente no son estatuas

Sino los verdaderos protectores del cráneo

Del poeta mayor

Un cráneo que da igual

Que haya pertenecido a Dante, a Safo o a Rimbaud

De repente se desata una batalla campal

Quien acompañaba al poeta menor desaparece

En un mar de empujones

Y lo último que el poeta menor puede ver

Es cómo el cráneo cae al suelo y rebota

Entre las piernas de los fanáticos

Como una pelota de tenis

¿Entonces no era un cráneo de verdad?

¿Era una imitación? se pregunta el poeta menor

Al despertar y sentirse como Atlas

Cuando se dio cuenta de que toda la vida

Había cargado sobre sus hombros un cielo imaginario

El poeta menor agradece en un susurro

A nadie en particular

Qué quietud

Cuánta paz trae la indiferencia

El olvido de tus contemporáneos

Poder bailar desnudo entre personas desnudas

Que hablan idiomas diferentes

Y se piden fuego mediante señas

 

 

VI

 

La musa del poeta menor tiene apariencia de bufón

Un bufón que cambia constantemente de nombre

Una semidiosa inubicable que no se dedica a entretener

A ningún rey o reina

Ya que todos ellos

Sin excepción

Trabajan para Solemnidad

La Que Nunca Ríe

Junto con los Medios de Comunicación

Y la Inquisición

 

 

VII

 

Pero nada de todo esto es algo nuevo

¿Quién no lo sabe?

 

 

VIII

 

Cuando al poeta menor le preguntan

¿Qué es la poesía poeta menor?

Suele contestar lo primero que se le viene a la mente

En esta ocasión dirá

Un coche-bomba

Que está estacionado en ningún lugar

Desde la época de las cavernas

 

LOS AMIGOS DEL SUICIDA


Poco después de su muerte

los amigos del suicida

simplemente evitando

determinados contactos en sus celulares

sin excusas ni discusiones innecesarias

con naturalidad para nada forzada

decidieron cada uno por su lado

dejar de frecuentarse.

No más de unas tres o cuatro veces

después de su muerte

organizaron verse

para tomar una cerveza

en un bar por todos conocido

o en una casa a fumar unos porros

para intercambiar algunas anécdotas random

entre los huecos mínimos que deja libres

un set de youtube bien bajito

pero cuando alguien lo nombraba

sentían como si cada uno de los presentes

fuera la pieza de un rompecabezas

el rasgo específico de una cara vidriosa

que se despierta a la fuerza y es atraída

por la presencia del grupo

desde un lugar en el que era mejor

dejarla dormir. Parecía como si les gustara

colocarse a sí mismos incrédulos

y ciegos en las manos de una autoflagelación

redundante, prender entre todos un fuego

capaz de iluminar sus perfiles

desde nuevos ángulos, ángulos insospechados.

Deseo la cercanía de un fuego de varias lenguas

de un fuego imposible de avivar,

un fuego que no pertenece a este plano.

Así es como su mejor amiga

lo entendió. Su mejor amiga

a la que él llamaba hermana

decidió sin despedidas irse una noche

caminando (literalmente)

a seguir con su vida al otro lado del mundo.

Y esa vida errante no evitó los clichés

en los que caen las vidas

de todos los inmigrantes, al menos

al principio. Pero aunque lo adivinamos

no asistimos a la descripción

de esos años. Vemos de repente

cómo una mañana, ya hacia el final

yendo en bicicleta con su hijo

al costado de una pradera

que parece una espalda infinita

él le dice que va a ir a recorrerla

para ver de cerca pastar a unos caballos.

Le cuesta ver de lejos pero fijando

la vista en el horizonte aparecen

los contornos de tres cuadrúpedos

envueltos en la neblina.

Nosotros sabemos que no son caballos

pero ella no. Tiene una duda pero es una duda

tan ligera como un escarbadientes, tan ligera

que ya ni es una duda. Escuchamos su voz que dice hijo,

cuídate, no te acerques tanto y cuando lo ve alejarse

como dando sus primeros pasos, apoyada en el alambrado

una claridad inesperada en el espacio

entre dos moles de nubes que se separan

la encandila y se tapa los ojos con la mano

y nada más que por un instante

siente entre sus dedos la crin revuelta

el corcoveo y el relincho

pero vemos que sus dedos

ya no tienen arrugas

ni sus uñas están

pintadas de azul marino. Y así

misteriosamente la pantalla

se pone en negro y empiezan los créditos

con una canción de REM:

Suspicion. Creo. Estoy más que seguro.

A grandes rasgos eso es lo que cuenta

la primera parte de una supuesta trilogía

entre otras historias secundarias: cómo se conoció

el grupo de amigos, sus experiencias juveniles

qué pasó con aquellos que se quedaron

haciendo especial hincapié

en la adolescencia febril del hijo de ella

(en un momento encuentra

fotos viejas del suicida

y por alguna razón desarrolla

una obsesión con el muerto, a tal punto

de “alucinar” que en la primera fiesta electrónica

a la que asiste lo ve bailando

en el medio de la pista o de “soñar”

que se lo encuentra en una playa vacía y paradisiaca

y él le convida una seca mientras siguen las huellas

que alguien dejó en la arena como si hubiera estado

caminando con sus pies y con sus manos).

Estas son las mejores escenas.

Las que fueron editadas en blanco y negro no:

en sepia. Las que parecen sueños,

una mezcla entre Lynch y Tarkosvky. Otras

no están tan logradas o ni siquiera

se hicieron (por ejemplo:

inmediatamente después del funeral

uno de los amigos del suicida

propone jugar a la ouija pero los demás

se oponen, con argumentos pobres y evasivas

poco creíbles, y el hombre guarda el tablero

donde lo encontró, cuando podrían haber hecho

algunas buenas escenas de esa situación

metiendo un elemento sobrenatural

que en pequeñas dosis y teniendo en cuenta

el final de la película a mi parecer

no hubiera desentonado). Por lo que sé

la segunda parte ya se está filmando

pero con una actriz diferente

por problemas de agenda o de contrato.

De la tercera todavía

no se sabe nada.

Dudo que algún día llegue a hacerse.

Ah y está en francés.